La agricultura de conservación es un concepto para el manejo de agro-ecosistemas para una productividad mejorada y sostenible, mayor rentabilidad económica y seguridad alimentaria, conservando y reforzando al mismo tiempo los recursos naturales y el medio ambiente. La agricultura de conservación se caracteriza por tres principios interrelacionados:
- La perturbación mínima del suelo en forma continua, usando el concepto de labranza mínima
- Una cobertura permanente de la superficie del suelo con materiales orgánicos
- La diversificación de especies cultivadas en secuencia y/o asociadas.
Los cultivos de cobertura permiten cumplir con el principio de cobertura permanente del suelo. Se usan especies que se introducen en las rotaciones de cultivos para proporcionar servicios beneficiosos para los agro sistemas. Algunos de los más importantes efectos ambientales proporcionados por los cultivos de cobertura incluyen la protección del suelo contra la erosión, la captura y la prevención de pérdidas de nutrientes del suelo, la fijación del nitrógeno por parte de las leguminosas, el incremento del carbono del suelo y mejoramientos asociados a sus características físicas y químicas, la disminución de la temperatura del suelo, el incremento de la diversidad biológica incluyendo organismos benéficos y la supresión de las malezas y las plagas.
Los cultivos de cobertura son utilizados durante los períodos de barbecho, entre la cosecha y la siembra de los cultivos comerciales y utilizan la humedad residual del suelo. Su crecimiento es interrumpido antes de la siembra del siguiente cultivo o bien después de la siembra de este, pero antes de que comience la competencia entre los dos cultivos.
CATEGORIAS DE CULTIVOS DE COBERTURA
Los cultivos de cobertura pueden ser agrupados en dos categorías: 1) anuales, sembrados en el período que no es favorable para la producción de cultivos comerciales y que son destruidos antes de la siembra de estos y, 2) coberturas vivas que crecen al mismo tiempo que el cultivo comercial durante parte o toda su estación de crecimiento.
VENTAJAS
Los cultivos de cobertura son convenientes para:
• proteger al suelo cuando no está cultivado
• suministrar una fuente adicional de materia orgánica para mejorar la estructura del suelo y crear una capa enriquecida
• reciclar los nutrientes y movilizarlos en el perfil del suelo con el propósito de eliminar capas de nutrientes de movimiento lento como el fósforo y el potasio
• actuar como «arado biológico» del suelo; las raíces de algunos cultivos, especialmente las crucíferas como la colza, son pivotantes y capaces de penetrar capas compactadas o muy densas incrementando la capacidad de percolación del agua del suelo.
• utilizar fácilmente los nutrientes lixiviados.
COMO FUNCIONAN LOS CULTIVOS DE COBERTURA
La dinámica de la descomposición de los residuos depende, entre otras cosas, de la cantidad de microorganismos, pero además de la meso- y macro fauna del suelo. La macro fauna está constituida principalmente por lombrices de tierra, escarabajos, termitas, hormigas, milpiés, arañas, caracoles, babosas y otros animales.
En la Agricultura de Conservación, la incorporación de los cultivos de cobertura y de los residuos de malezas desde la superficie del suelo hacia capas más profundas del suelo es un proceso lento y depende de la actividad de estos macro organismos. La actividad de los microorganismos es regulada por la actividad de los macro organismos porque estos suministran «alimentos» y aire a través de sus túneles. En esta forma los nutrientes son liberados lentamente y pueden ser utilizados por el siguiente cultivo. Al mismo tiempo, de esta forma el suelo es cubierto por un largo tiempo y es protegido del sol y del impacto de las
Gotas de lluvia.
En comparación, cuando los abonos verdes son mezclados con el suelo, una gran cantidad de oxígeno y «alimento» es procesado dentro del mismo, lo que lleva a un rápido desarrollo de la población de la micro fauna. Esta gran población puede descomponer el «alimento» ofrecido en forma más bien rápida pero en el momento en que el «alimento» se termina los microorganismos mueren debido a que no pueden sostener su forma de vida. En este momento es liberada una gran cantidad de nutrientes que si no son tomados por las raíces de las plantas pueden fácilmente ser perdidos por lixiviación. Durante todo el tiempo después de la incorporación del abono verde el suelo no está protegido por una cobertura, por lo que es susceptible al proceso de degradación que conduce a la erosión.